#11
Se podría decir que "Saving all my love for you", "The greatest love of all", "Didn't we almost have it all" y "Where do broken hearts go" forman una especie de cuarteto triunfante en la carrera de Whitney. Todas ellas fueron número 1 en su día y desde entonces se convirtieron en vehículos perfectos con los que otras nuevas artistas podían desplegar todo su talento vocal. Lucirse, vamos.
Aún así nadie las cantó -ni cantará- mejor que ella... y eso incluso en el caso de "Where do broken hearts go", que cuenta la leyenda de que no le hacía demasiada gracia a Whitney, que la encontraba carente de fondo y de temática simple, y tuvo que ser Clive Davis el que la convenciera y le asegurara de que sería un éxito. Y no se equivocó.
Nuevamente Whitney llegaba al número 1 de singles en la lista pop de Estados Unidos. Esta vez era el séptimo consecutivo y batía records de The Beatles y The Bee Gees. Terminaría la década empatada con Madonna que también lograba 7 singles números 1 (2 menos que Michael Jackson). Por su parte el álbum se metía en el selecto club de discos con 4 números 1; George Michael, Paula Abdul, Janet Jackson y Mariah Carey (1 menos que el "Bad" de Michael Jackson y recientemente el "Teenage Dream" de Katy Perry).
En la lista de r&b se quedaba a las puertas (#2) y volvía a reinar en la Adult Contemporary. Fuera de Estados Unidos la canción fue la menos exitosa del disco.
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