Belén Esteban

Una entrada en mi blog dedicada a Belén Esteban... ya es lo que me faltaba en mi vida. ahora si que ya, oficialmente, estoy acabado.

Pero es que no lo puedo evitar. Pago mensualmente algo mas de 60 euros por ver televisión de calidad, dos términos que en este país no van precisamente de la mano. En Digital Plus tengo casi todo lo que me gusta; documentales (yo soy de los que los ve), series, películas de calidad, deporte, música y los fines de semana un par de peliculillas guarras, jeje. Pero aún así, de vez en cuando, haciendo zapping acabas viendo cosas que fueron las causas por las que decidiste soltar la pasta cada mes.

Pasando por Telecinco o Antena3, te das de bruces con la realidad del país en el que vives; esa España, que aunque muchos intenten querer maquillar y sacar de su retraso de tantos y tantos años, sigue siendo negra y profunda.

Hace unos cuantos años (uno ya pierde la cuenta) apareció un personaje; Jesulín de Ubrique, torero (como no podía ser de otra forma en este país de peineta y cuernos) y con él, desde entonces, una cohorte de chupócteros que han vivido gracias al "trabajo" (matar animales) del primero.

Uno de esos parásitos es Belén Esteban, que se convirtió en fija en los platós de televisión a raíz de quedarse embarazada y posteriormente recibir la patada. Desde entonces ha contado todo; sus intimidades con Jesulín, las intimidades de los familiares de Jesulín, las intimidades de la esposa de Jesulín, las intimidades propias y las de su marido y por si todo eso no fuera suficiente ha usado a su hija. El defensor del menor pide a la fiscalía que prohiba seguir haciéndolo. Ya tenemos nuevo drama...

Y el vulgo la ha elevado a "princesa del pueblo".

Primero eran apariciones exclusivas a golpe de talonario, desde hace unos años está enchufada como "colaboradora" o "contertuliana" en programas del corazón. Bodas, escándalos, rumores de excesos, fiestas, posados en Interviú..

Y la vemos a diario como se le ponen los ojos en blanco, levanta el dedo, llora, dice que tiene la nariz así por padecer diabetes, hablando como una poligonera,...

Y el vulgo rompe en aplausos y ovaciones, y se dejan su dinero en mandar mensajes: "ariba belen ers l mas, tk gordi".

El periódico El Mundo hace una encuesta para elegir entre la Esteban y "la Campa"... así nos va.

Seguro que Jesulín habrá pensado alguna vez; "Nunca una corrida me dio tantos problemas".