Trabajar en verano es una tortura. Bueno, la verdad es que trabajar sea en el mes que sea debería estar prohibido, pero en verano es todavía peor. El calor agobiante, el saber que muchos de tus compañeros están disfrutando de sus vacaciones...Pero aún así, puedo decir que he pasado un gran mes de agosto. Hemos estado sin jefes casi todo el mes, sin el agobio de tener que producir sin parar, sin prisas pero sobre todo nos lo hemos pasado muy bien los 5 que estábamos en nuestro grupo.
Hoy ha sido uno de esos días en que los temas que sacábamos daban para muchas risas y los 20 minutos del bocadillo se han transformado en 45 (jeje) y uno de los mejores momentos ha sido el de mi compañero Raúl (que casualidad) que se ha puesto a hacer una cuenta aproximada de cuantas veces se había querido en toda su vida; o lo que es lo mismo; las pajas.
Teniendo en cuenta de que tiene 32 años, que empezó sobre los 9 ó 10 y que mantiene un ritmo de "3 por día", nos ha salido un total de (y de ahí viene el título) 24.000. JAJAJA!!! Y aún tenía los huevos de decir que "eso tirando por lo bajo".
Los demás llorábamos de la risa.
Mas tarde el tema ha cambiado a "momentos para olvidar" y ahí hemos contado mas o menos todos (Susana ha callado) algunos momentos de "tierra trágame" y luego ya, para acabar de digerir el bocadillo, han venido los momentos desagradables, donde ha triunfado Pepelu (o mas bien un conocido suyo) que jugando con sus amigos a ser "el rey de los cerdos" llegó a coger un trozo de jamón de una vomitada en el suelo y...
En fin, aún echaré la cena.
Mas tarde, en nuestros varias salidas a tomar el aire, ya han ido apareciendo temas un tanto mas serios y mas personales, pero siempre con buen rollo. Una pena que nos queden 3 días juntos, ya que el lunes cada uno volverá a su turno original y tardaremos en coincidir los mismos 5 locos que hemos compartido risas y vivencias.
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